jueves, 19 de agosto de 2010

La doble identidad de Mala Pe sale a la luz.

Me encontraba esperando el vuelto en una pizzería para poder retirarme luego de una muzza increíble, cuando me puse a observar a una pareja joven con una beba, en una mesa cercana a la mía.

La tierna criaturita de aproximadamente 8 meses estaba sentada en una sillita alta proporcionada por el establecimiento gastronómico. Se bamboleaba para todos lados peligrosamente, mientras sus padres se dedicaban a invocar a Eros; más preocupados por satisfacer sus bajos instintos que por su descendencia portadora de pañales.

En un momento, la mujer sacó la mano de la bragueta del hombre (en realidad no; pero es para imprimirle un elemento indignante al relato) y esbozó en un tono monocorde y desinteresado:

-Montotita, portate bien, no te muevas que ya viene la comida...

ACÁ HAGO UN PARATE EN EL RELATO Y OBVIAMENTE ME INDIGNO.

Escuchame bien infeliz a pedal, marmota mononeuronal, máximo exponente de la pelotudez humana...

De ninguna manera podés hablarle como a un adulto a un bebé que todavía no habla ni te entiende; alguien que hace 8 meses estaba nadando en líquido amniótico adentro tuyo.

Detesto a las madres que se las dan de avanzadas hablándole a un bebé o nene pequeño como si éstos pudieran entender y comprender la criminalidad de sus actos.

-Ay Menganito! No metas los dedos en ese tomacorriente directamente conectado al cable maestro de la central hidroeléctrica de Itaipú, puesto que puede provocarte una descarga tan potente que te llevaría a una muerte segura

-Hija, a mami no le gusta que te lleves a la boca esos frascos con veneno para roedores. Vas a tener múltiples hemorragias internas y una muerte lenta y espantosa...

Todo esto, lo dicen sin mirar al infante, mientras siguen chusmeando con la amiga/vecina/conocida lo rica que le quedó esa receta de Choly Berreteraga; o lo que es peor, cómo le dio masa el Roberto el fin de semana cuando tuvo una inspiración sexual que no le venía desde que andaban de novios y la ponían como conejos.

Me enfermaaaaan!

Los niños no tienen noción del peligro y no van a dejar de intentar matarse porque ustedes le adviertan con ese desgano inconcebible que no lo hagan.


En qué estaba? Ah, sí... Con los boludos de la pizzería.

Una vez que la boluda mayor le advirtió a la beba que dejara de moverse, siguieron dándole al arrumaco.

A todo esto, yo ya había activado mis súperpoderes, y sabía que algo malo iba a pasar. Lo presentía.

En el instante en el que llegó mi vuelto y me paré para retirarme, la beba hizo un mal movimiento y en cámara lenta comenzó a caer de cabeza al piso, derecho a una muerte inexorable y trágica. (Con suerte, a un buen golpe con traumatismo de cráneo y pérdida de masa encefálica)

Es mi blog y le voy a imprimir todo el dramatismo que se me cante. Estamos?

No sé cómo, volé, me abalancé y la agarré en el aire. La atajé antes de que llegara al suelo.

Es mi blog y le voy a imprimir toda la fantasmeada que se me cante. Estamos?

El corazón se me salía por la boca.
Toda mi vida se proyectó frente a mis ojos, como una película.

No, mentira. Eso seguramente le pasó a la beba, que estaba a punto de morir.

Me sentí la Wonder Woman salva bebés en peligro.

Ojo eh? Tengo cero coordinación, cero reflejos, cero iniciativa. Soy un desastre.

Menos mal que esa vez me iluminé y Murphy se hizo el boludo.

La agarré en mis brazos y empezó a llorar. Los padres, desencajados y pálidos como un papel, no paraban de darme las gracias.
Yo, que estaba más pálida que ellos, respondí con un tímido gracias y una mueca que intentó ser una sonrisa pero quedó a mitad de camino por los nervios que tenía.

Lo que pasó después fue muy avergonzante.

Unas viejas que estaban sentadas mirando el espectáculo, y entre las dos sumaban 385 años, empezaron a aplaudir.

El colmo para una heroína fóbica social como yo.

Trágame tierra.

Todo bien, pero los aplausos me provocan ganas de cavar un pozo y enterrarme adentro.

Es más fuerte que yo.

Devolví a la pobre criaturita sana y salva a sus libidinosos padres que esa noche seguramente iban a encargar trillizos, y me retiré del recinto con el rostro colorado como el culo de un mandril, por decir algo fino, elegante y femenino para finalizar el relato...

Y ahora los dejo. Me voy a patrullar la ciudad. Está llena de bebés en peligro.



Hasta la próxima, simples mortales.



13 comentarios:

Gabi dijo...

oohhh! y ahora? quién podrá defenderme???? ...... jajjajaa besos ami, muy bueno.

Me encantan estos relatos pseudofantántasticos! jajja

Besiiiiss
Gab!

LUKA DI GIOVANNI dijo...

seguramente es uno de los tantos niños accidentosos y no deseados ni al momento de concebirlos ni al momento de nacer( ojo el amor quiza aparesca una vez este el verbo hecho carne).

por otra parte, seguro que ese hecho marcara un ito, o le dan mas bola al niño o sera uno mas de la fila de los de falta de atención, caprichosos y revoltosos.

Mala Pe. dijo...

Gaby: No es pseudofantasía, lamentablemente es realidad. Lo único que no es real,ahora que me acuerdo, es que la pizza no era muzza, era 4 quesos.
Checho: Coincido y espero que el día que tenga hijos pueda ser la severidad en persona.

{.:M:.} dijo...

jajaaaaaa y por qué les diste las gracias vos????
Si Murphy se hizo el boludo, cuidate, después viene por partida doble...
Me mató lo de las viejas!!

Fede dijo...

¿yla pizza de que era?
¿habian pedido cerveza...moscato?
la chica...¿era rubia?

Mala Pe. dijo...

Eme: Les di las gracias por agradecerme(?) La verdad ni idea, por los nervios quizás (?) Hoy a un taxista le dije chau gracias, besitos. Cosas inexplicables de la vida. Murphy ya se las viene cobrando hace rato, no me preocupa.

Fede: La pizza era de 4 quesos.No recuerdo que cabello tenía la madre calenturienta, ya que justo estaba con la visión infraroja activada y no logré distinguir.

José N. Sepúlveda dijo...

Tengo una envidia q no me resisto a no contar yo mi anecdota heroica... una vez venia corriendo de la barda bajando y veo a orillas del canal principal un borracho que desaparece en la orilla... acelero... me tiro haciendo la secante q aprendi en voley... lo agarre del brazo y lo salve, el borracho se cago, balbuceo y me pidio q lo dejara abajo de un arbol. Lo bueno es q hubo testigos...
Por lo demas.. tu historia... estoy aplaudiendo de pie mientras te imagino ensayar una sonrisa como cristina richi en locos adams 2

Lola dijo...

"Los niños no tienen noción del peligro y no van a dejar de intentar matarse" es una frase que me acaba de generar una felicidad q no te imaginás! Ahora entiendo lo q publicaste en mi post de ayer con respecto a los aplausos. Puede ser q estemos tan fucking sincronizadas? Para el próx sorteo del quini, vos elegí tres, yo tres y repartimos la fortuna, sister!

Mala Pe. dijo...

Nekro: tu acto heroico me deja hecha un poroto... Y no me aplaudas de pie que me meo y me entierro toda meada...

Lolita: Dale! Despuès te canto los numeros y vamo y vamo! Beso grosssaa!

W Valdez dijo...

Viajando en algun colectivo de esos que van derecho por Rivadavia estaba una de esas madres tratando de que su hijo con guardapolvito bajara de la maquina expendedora de boletos...
-Montotito vení
-Si no me decis porque no voy nada
-vení
-...
-...

Como ya me veia que el pibe se iba a estrolar contra el parabrisa en cuanto frenara el colectivo me acerque al pequeño primate trepado a la maquina y le dije...
-Porque no vas con tu mama antes de que te estampes?
-uh?
Y como me puso una cara de no entender que problema era estar trepado arriba ya de la maquina me salio un sincero -PERO QUE PIBE PELOTUDO! Bien sonoro que fue acompañado de la aprobacion silenciosa de los demas pasajeros y de paso el pibe se bajo porque le di miedo.

Panqueca dijo...

Cuando sea grande, esa nena se va a acordar de vos como su "heroa".
Con respecto a los padres, yo también odio a los pelotudos que no te dejan hablarle como bebés a sus BEBÉS porque creen que después van a hablar mal (algo TOTALMENTE INCORRECTO porque no aprendemos a hablar por imitación sino por un mecanismo de esquemas de asimilación bla bla bla me puse nerd)
Pero PEORES son los padres que retan a sus hijos cuando se mandan una cagada propia de la edad como perderse en el super, es tu culpa, infeliz!!! por soltarle la mano a ese crío!!!

Cuando sea madre, estas cosas no van a pasar, carajo u__u

Mala Pe. dijo...

Anacostia: Perdónalo, la culpa no es del chancho (en este caso lechón) sino de la hija de puta que le da de comer y lo malcría al punto de dejarlo hecho un pendejo pelotudo.

Andre: Me mató la palabra "héroa"
Y es casi imposible no hablarle en forma pelotuda a un bebé. Son taaaaaan tiernos que uno involuciona y empieza con la boludez. Yo me pongo a flashear con que el pequeño en el fondo se caga de risa de semejantes grandulones hablandole en un tono infantiloide rozando lo impresentable.
Y de nuevo, la culpa no es del lechón sino del que lo alimenta...

Besos !

artistaFrustrado22 dijo...

Capaz los bebés asocian las expresiones con las palabras (?), capaz no. XD
Jaja no sé porqué, pero cuando decís que la atajaste me imagino a una sandía en una manta :D
Cuando aplauden tenés que salir corriendo :)
Saludos.