martes, 11 de mayo de 2010

Vendedor mala leche

Estaba haciendo nada en casa, cuando escucho que tocan el timbre. No sé por qué salí. Nunca atiendo. Nunca es para mí.

Era un chico joven. Me mostró un certificado fotocopiado, hecho mierda, firmado por Montoto Pérez. Truchísimo. Leí algo de HIV, y me imaginé por dónde venía la cosa...

-Estoy juntando plata para los remedios. Es una colaboración, lo que puedas.

Los remedios se entregan gratis en el hospital, pensé. Bueno, da igual. Debe necesitar la plata de todas maneras.

-Ah... Qué vendés?

-Mirá, tengo Curitas, hilos, agujas...

-Bueno, te compro Curitas. Justo tengo este dedo lastimado que me está matando...

-Tenés la OFERTA: tres cajas por 9 pesos! (WTF? OFERTON! )

-Ah no, no quiero tantas! Es mucho. Dame una cajita sola. Te la compro de onda, no tengo un mango! (Y era cierto)

-Pero es la oferta! Si no, cada caja te sale 2 pesos. No te conviene!

Ok. A ver. Odio las matemáticas. No se cuánto es dos más dos. Pero evidentemente había alguien que sabía muchisimo menos que yo. Me vio cara de pelotuda sin dudas.
Tuve muchas ganas de decirle que me diera las 3 cajas sin la "OFERTA", para ahorrarme 3 pesos, pero no lo quise avivar.

-Bueno, no me importa, quiero una sola caja, aunque venga sin “OFERTA”. Aparte la idea era colaborar, no? Me gasté todo en fotocopias, me quedan estas monedas.

-Mirá la casa que tenés! Me vas a decir que no tenés 9 pesos?

-La casa es de mis viejos, no mía. (Me cago en vos, en tu vecino, en tu prima, en tu perro y en todos los que te conocen. Qué me venís a correr con la casa? La puta que te parió!) Y no, no tengo 9 pesos en este momento. Tengo dos. Me vas a dar la caja sí o no?

Con una cara de orto tremendo, me dio las curitas y se fue. Ni chau dijo...FORRO.

Una semana más tarde, volviendo en colectivo de Neuquén, sube el mismo pibe repartiendo calendarios. Esta vez era sordomudo... Hacía señas y cuando la gente le hablaba, señalaba su oreja haciéndose el que no entendía...

Para encajarme las Curitas, bien que hablabas todo de corrido y me escuchabas perfectamente, GIL!

Pobrecito, el HIV debe haberle afectado las cuerdas vocales y el oído, de una semana para otra... Hijo de un sindicato de putas!

No me reconoció. Cuando pasó a buscar la plata, le regresé el almanaque, obviamente sin dinero, y le dije:

–La semana que viene mataría que hicieras de cieguito. Garpa un montón...

Se hizo el que no me escuchó. Yo sé bien que sí.

Hay cosas con las que no se jode. La salud es una de ellas. Me amargó el día.

4 comentarios:

LUKA DI GIOVANNI dijo...

yeh, por culpa de boludos así, despues cuando pasa de enserio uno desconfia...

una vuelta vinieron a casa a ofrecerme una subscricion de bolsas de basuras, diciendome que todos los miercoles me entregarian 100 bolsas y que ahora me daban dos por diez....jejej, le dije bueno, pero no por que me comí el cuento, sino que necesitaba las putas bolsas.
lo que llamaba la atención era el atuendo, digo, a otra persona si, a mi no, era el atuendo de cliba año 1998....estaba re colgado y no me iba a poner a explicar que justo me iba al chino a comprar blsas.
jajajaja, el tipo se fue contento pensando como habia caido el pichon este....

mas luego en otra oportunidad me lo cruce en el tren, estaban escabiando en el furgon, cuando paso me lo quedo mirando, no se si se apiolo o no, cuestion es que bajo la mirada haciendose el boludo...

Anónimo dijo...

100% Argento... lamentable, pero así estamos. Si no es cagando a la gente así es de otras maneras. Todos tenemos algo de garcas adentro. Condenados...

Malena dijo...

El que no llora no mama, y el que no afana es un gil...

Ivan Guede Santos dijo...

Triste, así como también son tristes las vueltas de la vida que llevaron al chabón a hacer eso. Aguante la sapa verga!!!